Feeds:
Entradas
Comentarios

Archive for the ‘Colet’ Category

Hoy no voy a escribir mucho. Por un lado la gripe me tiene totalmente fundido y agotado y por otro lado esta vez daré más importancia a las imágenes. Las palabras las pondreis vosotros y serán las que aparezcan en vuestra cabeza al ver las fotografías. No obstante, no podré evitar el escribir una pequeña introducción a ellas.

Comenzamos con una fotografía de Château Rayas. Para cualquier profano, entre los que me incluyo, esa fotografía podría estar realizada perfectamente en Villatobas.

Como contrapunto una fotografía realizada desde un barco en la ribera del Sil. Da escalofríos pensar en cómo se podrá trabajar ese viñedo. Gana, y con mucho, a todas las fotografías que he visto hasta ahora de esa zona, de Bierzo, de Priorato o de Alemania. Brutal.

Otros dos conceptos distinto llegan ahora. Habréis leido lo beneficioso de la tecnología, la pulcritud en las bodegas, la asepsia….

… y sin embargo hay contrapuntos como el que os muestro y al que parece que no le salen mal los vinos….

Os cuento ahora los vinos de este mes:
– Baltos 2005. Dominio de Tares. DO Bierzo (5.71 EUR)
Pensaba, con las primeras copas, que sería este otro mencía afeitado y recubierto de un parafina sápida que impediría a la variedad expresarse con propiedad. Estaba equivocado. Esto es así al principio, pero dejando al vino respirar se expresa con mucha claridad. No lo vi así hasta el día siguiente de haberlo abierto.
El primer día era un vino correcto, pero humillado. El segundo día sí se levantaba sobre sus pies y hablaba con claridad.
– Jean Leon Petit Chardonnay 2007. DO Penedés (10.05 EUR)
Impecable. Vino de cartabón y escuadra como la portada de una revista de decoración. Pomelo, manzana, hierba y un toque de anís; acompaña en boca con un paso oleoso absolutamente preciso. Ha ido muy bien con una pescadilla rellena de espinacas frescas y gambas.
Nunca le diría que no a este vino y sin embargo me recuerda a cuando algunas mujeres se juntan y hablan de algún zutano, para sentenciar severamente y con dejadez: «Ay… es tan guapo que empalaga».
– A Priori. Bodega Josep Colet. DO Penedes (6 EUR aprox)
DEG Sep/07
Parece bastante cansado. No hay trazas de ello ni en su color ni en el carbónico, sin embargo se encuentra bastante lejos de la frescura y viveza que he podido beber en botellas anteriores. ¿Se tratará de una botella o ya se encuentra en su recta final?
– Grand Cuvée 2003. Bodega Josep Colet. DO Penedes (8 eur aprox)
Abro esta botella para resarcirme de la anterior.
Sigue excelente. Cierras los ojos, en el sofá, un sorbo y si no fuera por las pantuflas es como si estuvieras en un departamento de primera clase de… pues no sé porque nunca he ido en primera clase de nada; poned vuestra primera clase preferida. Cremosidad y acidez se imbrican absolutamente. Muy bien con un paté de campaña y una tortilla murciana.
– PX Añejo Wisdom & Warter. Bodega Wisdom & Warter. DO Jerez y Manzanilla-Sanlucar de Barrameda (4.67 EUR)
Dulce infidelidad. No suelo hablar de vinos dulces, pero no es porque no me gusten, es sólo que estos los suelo consumir al final de la comida y a esas alturas ya suelo estar servido y no me suele apetecer. De hecho suelo beber estos vinos como copa de domingo. Tras la cena y como preparación mental para la siempre ardua semana que está por comenzar.
Hasta ahora mi PX habitual para el frio invierno era el de Alvear, el cual tiene una RCP tremenda. Eso hasta ahora, que le he sido infiel con este PX. Dátiles recubiertos de chocolate amargo y el golpe de acidez de la cáscara de naranja seca y los orejones. Denso y sin resultar empalagoso. Excelente RCP.
– El Vino de los Cónsules de Roma 2006. DO Bierzo. Elaborado y embotellado por Pérez Caramés (4.52 EUR)
Lo cierto es que no me gusta nada el nombre, pero así como hay vinos que he comprado por que me gustaba la botella o la etiqueta intento juzgarle por lo que hay dentro.
Es otro ejemplo de mencía sin aditamentos. Marcado olor a moras maduras, toques vegetales, ligero amargor. El cuadro global se queda un poco corto y por añadidura al segunda día muestra toques de oxidación, pero en cualquier caso es un vino solvente con buena RCP y que ha acompañado bien una ropa vieja.
– Castillo de Agüarón Rosado 2008. Embotellado por Grandes Vinos y Viñedos, S.A. DO Cariñena (2.20 EUR)
El hermano rosa del añorado Castillo de Agüarón Viñas Viejas. Aquel era un pedazo de vino con mayúsculas a un precio insuperable, que cayó en desgracia cuando lo convirtieron en un enoproducto marcado por las mal llamadas variedades mejorantes. Desde aquí un par de oraciones por su alma.
Vamos ahora con el rosado en cuestión. Primero del año y se encuentra disfrutable ya. Zumo de sandía y frambuesas junto a una acidez redondeada. Paso muy ligero. Sencillo y sin pretensiones.
– Artazuri 2007. DO Navarra. Bodegas y Viñedos Artazu (3,86 EUR)
Muy distinto respecto a la añada anterior. Muestra de forma muy brusca diferentes facetas, a saber, vino joven, gominolas rojas, toques verdes, toques de astringencia. Es como si estuviera nervioso.
– Pardina 2005. Bodegas Victoria, S.L. DO Cariñena (4.52 EUR)
¿Cómo explicarlo? ¿Conoceis el Spetzi? ¿no? Se trata de una curiosa bebida germana compuesta de refresco de cola y naranja. Bueno, pues este vino me ha recordado por completo a esta bebida, concretamente a Pepsi con Mirinda de naranja. No ha cambiado ninguno de los cuatro días en que ha estado abierto. Lo mejor de este vino han sido los recuerdos del suave verano bávaro y los Biergarten.

Os dejo ahora con el capítulo de «¿Alguien sabe cómo sobrevivimos a los ’80?». Con el título del post no podía haber otra canción que no fuera esta. Observad al público que merece la pena; es un adorable e inocente cuadro costumbrista de aquella época. No os perdais el final del vídeo: La abu comentando la jugada. Impagable.

Ahora los créditos de las fotografías:
– Château Rayas: Proviene del blog de Paco Berciano.
– Sil: Proviene del sitio en Flickr de Nacho Penado
– Henri Bonneau: Proviene de http://www.chateauneuf.dk/en/cdpen29.htm
– Ysios: http://europix.dk/

Read Full Post »

Comparte el vino con la literatura el ser uno de los medios de transporte más curiosos de los que existen. Te permiten viajar en cualquier época del año, ya sea temporada alta o temporada baja. Es rápido, limpio y contamina bien poquito. Te permite viajar cómodo y ligero. Tú escoges cuándo, cómo e incluso puede que con quién.
Te permite además viajar en el tiempo, a vendimias pasadas, a situaciones vividas a momentos que vienen a tu memoria mediante el vino que estás bebiendo. Te permite no sólo viajar a lugares conocidos, si no que te permite volar en décimas de segundo a rincones y situaciones que nunca has vivido, que nunca antes has bebido. La niebla de una mañana en Toscana, el Atlántico batiendo la costa francesa o el levante alborotándolo todo en Sanlucar de Barrameda. Sí, sin duda el vino nos permite viajar a lugares que nunca has pisado y verlos claramente en cada sorbo, aunque para ello haya que cerrar los ojos. En ocasiones para ver las cosas con total claridad es necesario cerrar los ojos.

Análogamente a como ocurre con la literatura cuanto más viajas más ganas tienes de seguir haciéndolo. Este año he viajado por Loira, Burdeos, Alsacia, Champagne, Beaujolais, Mosela, Palatinado, Eslovenia, Niagara Falls… y también me he quedado más cerca, pues he tocado Rioja, Ribera del Duero, Penedés, Priorato, Montsant, Alicante, Valencia, Jeréz, Sanlucar, Bierzo, Castilla-La Mancha…. Algunos que se me habrán olvidado y otros muchos que no se me van a olvidar. ¿Muchos? ¿pocos? Ahora que lo leo en voz alta me doy cuenta de lo poco viajado que estoy, si bien y en cualquier caso siempre con la promisión de que lo que venga sea más y mejor que lo que se deja atrás. El siguiente viaje comienza cuando ha finalizado el anterior. Sigamos viajando. Sigamos bebiendo.

Este mes he viajado por los siguientes lugares:
– Colet Assemblage Extra Brut. Bodega Josep Colet. DO Penedes.
Degollado Oct/07
De color más cobrizo que en ocasiones anteriores, lo he bebido pensando en un Roscón de Reyes. Debo estar sugestionado por las fechas, pero le he encontrado notas de bollería, fruta confitada, almendras… Lo dicho, un roscón antes de tiempo.

– Viña Cubillo Crianza 2002. Bodegas López de Heredia. DOC Rioja (8.5 EUR)
Botella muy distinta a la que había bebido en alguna ocasión anterior. Frente a aquella estimulante botella anterior que invitaba a beber y más beber encuentro en esta un color evolucionado y aunque el vino estaba suficientemente correcto y bebible se mostraba ciertamente exhausto. ¿Se ha caido o mala conservación?
Hasta hace poco me había quedado con esta impresión, pero un post reciente del amigo Camblor me hizo enarcar convenientemente la ceja, pues como podeis leer no he sido el único al que le ha ocurrido esto. ¿Trígono de casualidades? Pues no te digo yo ni que sí, ni que no, veremos si seguimos tirando del hilo y esto ha sido un mero tropezón de botellas concretas.

– Viña Bosconia 1998. Bodegas López de Heredia. DOC Rioja (12.54 EUR)
Días de niebla y lluvia. Busco en la nevera algún vino, me encuentro con esta botella y con algo que no había reparado hasta hoy. La cápsula se encuentra ligeramente abultada. ¡Ay! me empiezo a inquietar. Lo compruebo y en efecto en algún momento esta botella había rezumado y no me había dado cuenta hasta hoy. En fin, para mañana es tarde, de modo que será cosa de abrirla a ver qué hay.
Bebo algunos sorbos mientras cocino, para comprobar, primero en el color y luego todo lo demás, que no está todo lo fresco que debiera estar a estas alturas. Una lástima. En cualquier caso sigue estando rico, con suaves tonos de «madera-LdH», guindas en licor, cuero, tabacalera y jabón de afeitado. Me rio mientras cocino los callos con garbanzos recordando las letras de Abraham García en las que decía que los callos, como los besos, o son con lengüa o no son. Se enfrían, de modo que soy yo quien dice ahora que Verba volant, los callos manent.

– Fuentespina 2007. Bodegas Fuentespina. DO Ribera del Duero
Sorprendente y sorpresiva sorpresa. Por un lado esta botello llegó en la habitual cesta de Navidad y por otrooooo… pues que es el segundo vino de Ribera del Duero que me gusta este año. ¡Que suenen los pífanos y timbales si’l vous plait!

Es un sencillo vino joven y me ha resultado bien agradable. Fruta roja, algo de chuches y nada de sobremadurez con un grado alcohólico contenido. Buscando por ahí parece que el precio anda entre los 4-5 EUR lo cual le haría tener una buena RCP.

– Marcel Lapierre Morgon 2006. AOC Morgon. (12 EUR)
Cuvée sin sulfuroso.
Congregose la animalidad toda en el interior de esta botella. Era el arca de Noé y no faltaba ni uno solo de los animales de la creación (he pasado lista «porsiaca»). Mortal para la pituitaria oiga. He mantenido el vino abierto durante cuatro o cinco días y no había más que olores animales en una cantidad absolutamente insoportable. Lamentablemente se ha ido por el fregadero.

– Itsas Mendi 2008. Bodegas Itsas Mendi. DO Bizkaiko Txakolina (8.9 EUR)
Un toque de primavera que me lleva junto al mar en este frío invierno. En este momento se encuentra muy disfrutable. Hierba recién cortada, hinojo, piña, un ligero toque amargo al final con un paso más denso de lo que te puedes esperar visto sus aromas tan frescos. Un vino muy vivo, alegre y jóven en este momento.

– Acústic 2007. Acústic Celler. DO Montsant (12.9 EUR)
Me ha dejado bastante indiferente. No voy a ponerme a buscar palabras para describirlo o para hacer un listado de descriptores al uso, porque lo cierto es que no me ha motivado a nada en absoluto. Un vino correcto sin más. Muy corto para el precio.

– Vega Almarana 2001. Hnos. Ortiz Granero, C.B. Vino de la Tierra de Extremadura.
Un vino invisible. Desde el momento en que el líquido toca los labios este se desvanece. Decir corto es quedarse idem. Beber y olvidar simultaneamente.

Interrumpo la programación habitual y en lugar de una nueva entrega de «¿Alguien sabe cómo sobrevivimos a los ’80?» os dejo con una canción que viene a mi mente en estas fechas (es que a mi la Navidad como que no…)

Nota: La imagen proviene de la galería de imágenes de FredArmitage en Flickr.

Read Full Post »

Lujuria, gula, avaricia, pereza, ira, envidia, soberbia.

Todos, en mayor o menor medida soy pecador de los siete y si de alguno no lo soy seguro que estoy en camino. Y lo peor ¡sin arrepentimiento! Como siete pecados este mes han sido siete los vinos, a saber:

– Tierras de Albares 2006. DO Bierzo (5,08 EUR)
Otra muy buena mencía sin maquillaje. Fruta negra muy madura que está escondida detrás del notable toque vegetal y con un agarre en boca que le da una presencia rústica bastante interesante. Tiene personalidad. Estoy dándome cuenta de que estas mencías sin madera le van muy bien a la legumbre invernal. En el caso de hoy unas lentejas. Lo dicho, un mencía muy recomendable con muy buena RCP. Sigo en mi línea de mencías sin madera.

– Cuatro Pasos 2006. Martín Codax. DO Bierzo (6,04 EUR)
Mencía redondeada, como un toro afeitado. Tiene todos los componentes que esperas en un vino hecho con mencía. Frutos negros, toque vegetal y una ligera astringencia, todo ello embutido dentro de una esfera. No sé si merced a cómo se ha vinificado o bien debido al par de meses de madera; de esta última sólo se observa un ligero toque de café al descorchar la botella, de modo que bien por esta parte. En definitiva me ha resultado un vino agradable del que no me importaría beber más botellas.
Como he comentado en anteriores notas de cata parece que la mencía es un buen acompañante de la legumbre, en esta ocasión ha sido buena compañía para un cocido.

– Gaba do Xil Godello 2007. Compañía de Vinos de Telmo Rodriguez. DO Valdeorras (6,83 EUR)
Redondo, redondo. Para importar o exportar dando igual el sentido de la marcha de las cajas. Imposible que no te guste. Improbable que te enamore.

– Colet Blanc de Blancs Extra Brut Traditionnelle. Josep Colet. DO Penedes. (aprox 8 EUR)
Poco tiempo para hacer la comida, estrés, prisa. No hay descanso. No hay tiempo. Necesito un vino que me haga sentir bien, cómodo. Que me haga sentir en casa cuando beba el primer sorbo.
Mmm…. aunque la primera copa mostraba un carbónico más que vivaz desde ahí se ha mostrado tan cremoso como las ocasiones anteriores. Durante el tiempo que ha durado la cocina del marmitako me ha hecho sentir bien. Me acostumbré a decir Gemütlich.

– Heymann-Löwenstein Schieferterrassen 2006. Mosel-Saar-Ruwer (15 EUR)
Hoy no he comido más que un sandwich. Semana laboral larga y agotadora. Por favor, dejadme que tenga mi momento naif del viernes.
No voy a cocinar más que una tortilla francesa con atún de lata, sí, de ese que está de oferta en el supermercado más cercano. ¿Fashion? pues mira no, pero me temo hoy no doy para más. Una alimentará mi cuerpo, el otro alimentará mi alma.
Queso. Cerilla al encenderse. Lata de anchoas. Sólo unos segundos, despues… se llena la boca y te explota la riesling en en los sentidos. Miel, limón y la naranja del roscón. Riesling orondo con dos tallas de más… si no fuera porque se despereza en él un toque de sequedad que corta la línea que lo llevaba al dulzor y que le pone el debido corsé. Muy recomendable.

– Château Bouscassé 2004. AOC Madiran (10,6 EUR)
Conociendo el alto porcentaje de tannat (65% y el resto cabernets, según la página web de la propia bodega) que tiene este vino he considerado adecuado jarrearlo al menos una hora antes de probarlo. Durante el jarreo el vino muestra aromas de lo más amable a fresas maduras, aceitunas, algo de tocino. Esperaba encontrarlo así de amable en boca… ¡zas! Tremenda tanicidad que me deja totalmente noqueado. Algo tremendo. Me ha ganado. Fin del primer round. ¡Pa’bernos matao!
Veamos qué me encuentro al día siguiente. Toda esa tanicidad se ha ensamblado con el resto del vino y ahora le da un giro rústico de lo más atractivo, estando ligado a otros elementos de este vino, como son su firmeza y dureza. Es un vino realmente potente y lo digo en el buen sentido. Los que me conoceis sabeis de lo poco que me gustan los vinos que sacan pecho y son pura potencia a golpe de extracción y grado alcoholico, sin embargo este es… ¿cómo decirlo? Potencia esencial. Es como si este vino fuera así sin pretenderlo, como decía el escorpión: Está en su naturaleza. Esa rusticidad y potencia hace que pasen desapercibidas otras características, porque ahí de fondo tiene una acidez que también es reseñable.
¿Con qué tomarlo? He optado por un choque de trenes. A la potencia, más potencia. Se ha terminado de hacer buen amigo de un plato de manitas de ministro y a la cena unos níscalos cocinados en esa misma salsa.
Recomendable si buscas un vino sin atisbo de sutilidad. Vistas las credenciales con las que se presenta me pregunto como evolucionará. Me puedo equivocar, y es lo más probable, pero creo que tiene lo suficiente para crecer con el tiempo.

– Borsao Selección 2007 Blanco. DO Campo de Borja. (4.3 EUR)
Manzanas, manzanas y más manzanas. Un paso oleoso, con la acidez justa y un deje amargoso que completa el conjunto. Sencillísimo, pero solvente. Buena RCP.

Como veis este mes toca post corto. Lo breve, si breve, dos veces breve. Era así ¿verdad?
En cualquier caso no me voy sin dejaros una nueva entrega de «¿Alguien sabe cómo sobrevivimos a los ’80?». Os dejo un vídeo que no es la versión original, pero parece todo un epítome de aquellos tiempos.

Nota: La imagen corresponde a «Los Siete Pecados» de El Bosco.

Read Full Post »

Se canceló a última hora el viaje al Bierzo planeado y tocó quedarse en Madrid, pasando el tiempo de la mejor manera posible y esto, como no, en mi caso suele implicar algunos vinos de por medio. La verdad es que en 4 días he bebido algunos vinos, muy interesantes y he caído enamorado de uno en concreto que no conocía. Pero vamos por orden.

Todo comienza el viernes a las 21h en casa de Letroncio para hacer una de las típicas reuniones Sarmiento de sobaquillo. Un buen listado de vinos casi 6 horas de risas y buena compañía. Dado que fueron muchos vinos, voy solo a lo que mas me gustó. De los espumosos destacaron el De Sousa y el Diel, pero este último me lo salto ya que hablaré de él en el post de los riesling. El De Sousa Zoémie Brut Précieuse resultó un champagne de lo mas interesante y con muy buena RCP (anda por los 30€). Serio en nariz, de buena intensidad, mucha bollería y mantequilla, sobre fruta blanca y buena mineralidad. En boca carbónico bien integrado, amplio y con marcada acidez y un final largo y mineral. Para repetir. Luego apareció el Patio de Samuel Cano, tanto en su versión comercializada, 2005 como una muestra de barrica de lo que será el 2007. Curioso, es un 50% Syrah y Petit Verdot, siendo esta última una uva que no suele agradarme mucho y faltando por hacer la maloláctica, el vino me pareció bastante interesante. Buena fruta en la nariz y una boca muy amable, incluso mas que la del 2005, apunta buenas maneras. De los tintos, los que menos me gustaron fueron el Penfolds Bin 128 2001 y el Chaparral 2005. Los dos demasiado alcoholicos y no muy armonicos. Lo mejor el Tauri 1998, un delicioso Aglianico dell’Irpinia, en un momento muy bueno de consumo. Buena fruta roja en nariz, alguna nota terrosa de hongos, cueros y una marcada mineralidad, en boca estaba muy bonito, con un tanino muy pulido y una excelente acidez y persistencia invitaba a repetir. Tambien andaba por ahí un Conde de los Andes 2001, que no estaba mal, clásico. Para el final dejamos un Sablonnetes Coteaux du Layon Rablay 2005, que desafortunadamente nos dio corcho, y un Oloroso Tradición VORS, un vino quizás para otra situación para dedicarle toda la atención que merece. Compleja y profunda nariz con una boca de marcada acidez, muy calcáreo, casi imaginabas el suelo del que procedía al beberlo.

No comenzaba nada mal el fin de semana. Ese mismo día había comido yo con otro interesante vino. El Gorrondona 2006, que catara mi compañero Jose el otro día, no dejandole muy satisfecho. En mi caso el vino comenzó también algo sucio en nariz, reducido, pero rápidamente se limpia y comienza a aflorar una intensa fruta, moras, arandanos y fresas, sobre algo bosque húmedo, se hace fresca la nariz, alguna nota anisada y una buena mineralidad. En boca es muy agradable, se bebe con suma facilidad, sobretodo durante la comida, jugoso y frutal, buena acidez y un tanino presente pero no molesto. Cayó la botella entera durante la comida. Repetiría, si se encontrase más fácilmente.

El sábado me esperaba a comer mi compañero de blog para hacer un intercambio de vinos y ya que estabamos abrir algunas cosas.

La foto habla por si sola, unos señores vinos bien curiosos y bien agradables, todos en torno a los 10 €, ¿quien dijo que había que ser rico para beber bien? El primero, el Viña Tondonia Rosado 1993, me parece una maravilla, casi imbatible en cuanto a RCP (siepre y cuando te guste este estilo). Se encontraba en perfecto estado a sus 15 años de edad. Un color precioso ocre-anaranjado, vivo, nada marrón, brillante. El vino llevaba abierto un buen rato y se notaba por lo limpia que se presentaba la nariz. Frutillos rojos, grosellas, fresas, sobre unas notas de bosque mojado, como de ribera, algo de regalices, hoja de tabaco, tofe y mineralidad terrosa. En boca, simplemente delicioso, acompañando al risotto de maravilla, acidez, mineralidad, frescura. No te cansas de él.

Continuamos con una deliciosa carrillera de cerdo perfectamente cocinada por Jose, de la que repetí todo lo que pude y acompañado del vino de Eric Texier, St. Gervais 2000. Otro vino que me enamoró a primera vista. Syrah, Garnacha y Monastrell de las Côtes du Rhône, con 8 años se mostraba en muy buen momento. Nariz de media intensidad pero bastante compleja, daba una interesante fruta madura, casi en compota, pero muy bien equilibrada con otras notas que aportaban frescura, tierra mojada y sotobosque, aceituna negra, leves notas especiadas de pimienta negra sobre una buena mineralidad. En boca tiene buen recorrido, frescura y acidez, pulido tanino deja un final largo con recuerdos frutales y minerales. El Auslese de Barzen, muy bebible, no hace si no confirmar mis anteriores comentarios.

Y finalmente el que mas me ha impresionado de todos. El Colet Extra Brut Assemblage. ¡Que cosa mas bonita y original! Creo que acabo de descubrir algo que me va a crear una fuerte adicción. Degollado en noviembre de 2007. Precioso color rosado-cobrizo, burbuja fina, que forma corona.En nariz es profundo y complejo. Me cuesta describirla por la originalidad de la misma. Hay frutos rojos, cerezas, algunas notas citricas como de pomelo, notas de pastelería, bollos recien horneados y mantequilla, con un forndo mineral.
En boca, es vinoso, con buena acidez, carbónico perfectamente integrado y buena amplitud. Largo, invita a volver a él. Delicioso. Lo teneis en Coalla Gourmet, cuesta unos 20€, pero, aunque no me guste compararlos, me ha proporcionado mayor satisfacción que algunos champagnes bastante mas caros.

Read Full Post »

¿Os ha dicho alguien que el clima está cambiando? Pues os ha mentido vílmente. ¡El clima ya ha cambiado! No, no os voy a contar nada de los montones de conferencias que se dan alrededor del mundo, ni de aquellos que hacen negocio navegando en estas agüas, ni os propondré enlaces a montones de información al respecto. Para todo ello os bastais y os sobrais con Google. Todo esto es mucho más sencillo: Id a pasear al campo.
Cuando yo era pequeño era por marzo cuando se despertaba el campo. Este año, a finales de enero, los pequeños pájaros ya estaban en celo, mariposas que hace años no aparecían hasta que el calor ya se había afianzado y garantizaba su supervivencia remolonean ahora en la terraza de mi casa. Ahora poned la televisión. ¿Habeis visto los glaciares? O algo mucho más prosaico, poned Eurosport, ¿habeis visto las pruebas de esquí? ¡Es para que se nos salten las lágrimas! ¡Estan casi esquiando sobre tierra! Las montañas no tienen más que un penacho de nieve en la cumbre, las pistas continuamente innivadas artificialmente y sólo hay nieve en la pista de la prueba y con un espesor escalofriantemente bajo. ¡¡¡ Y todavía hay templagaitas autoproclamados «líderes mundiales» que niegan lo que es escandalosamente evidente!!! : ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ Nos hemos cargado el planeta !!!!!!!!!!!!!!!!!
¿Ahora qué? Pues junto a los que niegan lo evidente todavía hay algunos papanatas que pretenden hacerlo ver como algo positivo. El Mar Negro dejará de existir, pero eso sí, en algunas zonas no es necesario chaptalizar y en otras tienen once añadas excelentes por década. Quienes tengan guardado en su bodega algún Eiswein que lo guarde como oro en paño para las generaciones futuras, porque será como quien tiene un hueso de mamut en el congelador junto al morcillo para el cocido.
Estoy muy pedigüeño y os voy a seguir pidiendo cosas. Ahora buscad en algún libro, o en Internet si no hay otro remedio, alguna imagen del ‘David’ de Miguel Angel. No, dejadlo, no lo hagais, ya lo hago yo por vosotros. ¿Me puede alguien explicar como los humanos somos capaces de crear algo así y destruir el planeta sin el más mínimo rubor? Incomprensible.
Como veis no estoy muy optimista con este tema, pero tengamos todos presente que cada granito de arena cuenta. Que todos y cada uno de nosotros hemos de hacer lo que esté en nuestra mano para que el mundo que dejamos a las siguientes generaciones sea un poquito mejor que el que nosotros encontramos. ¿Demagógico? Pues tú no corras y fiate de la Virgen.

Ahora retomemos la programación habitual y veamos los vinos que ha habido este mes de febrero. Ha sido un mes en el que el beber ha sido un poco a salto de mata. Le tomo prestado a Iñaki (Baba O’Wines) el toque de rock, pero a mal tiempo, buena cara. I shoot from the hip (…) Stiff upper lip!
http://www.youtube.com/watch?v=2tlAPPq2aN0

Vamos ya con los vinos del mes.

– Torre de Gazate 2006. Vinícola de Tomelloso. DO La Mancha (3.09 EUR)
En mi habitual búsqueda de vinos con buena RCP, que nos permitan llevarnos mejor con el EURIBOR le hago caso a un buen amigo y decido probar este vino.
Tiene aspecto de vino joven (lo es). Color granate limpio. No está mal, redondo. Es un vino sencillo en todos sus aspectos. Suficiente por el precio, de modo que supongo que lo probaré de nuevo en sus próximas añadas.


– Gorrondona 2006. Doniene Gorrondona. DO Bizkaiko Txakolina (aprox 8 EUR)
Ha costado meses localizarlo y por esa buena gente que uno llega a conocer en este mundo al final llegó este vino a la copa. ¡Gracias Jesús!
Vamos con el vino. Guindas en licor, toque cárnico, una ligera suciedad como de gallinero. No del todo desagradable, pero tampoco agradable. Ligeramente rugoso en boca. Con más aire aparecen fresas frescas. Es un vino muy agradable para acompañar la comida. La pasta del martes, la pizza del jueves o el pollo asado del domingo, incluyendo las sobras de este en sandwich al día siguiente.
No estoy seguro, pero tras hablar con Jesús me temo que esta botella no estaba en condiciones plenas. Sus sensaciones respecto a este vino son tan distintas que no pueden pasarse por alto. Igualmente personas en cuyo paladar confío también muestran sensaciones totalmente distintas respecto a este vino. Olaf tiene otra botella de este vino, ya nos contará como lo ve y a mi me queda otra, de modo que seguiremos informando.


– Charles Hours Cuvée Marie Jurançon Sec 2002. Ap. Jurançon Sec Contrôlée (11.95 EUR)
Ya pasó el momento de este vino. El color dorado en la copa ya te anuncia lo que no quieres admitir. Apenas queda ningún atisbo de lo que era, no más que algún coletazo de su acidez. Una lástima, pues este vino en plenitud es uno de los más estimulantes que han pasado por mi copa en los últimos años.


– Colet Assemblage Extra Brut. Bodega Josep Colet. DO Penedes (aprox 15 EUR)
Decía yo el mes pasado que a este vino no le iría mal a un risotto de espárragos y calabacín.
No iba yo a quedarme con las ganas, que eso a mi edad debe ser muy malo.
En efecto, lo vinoso de este vino, valga la cacofónica redundancia, junto a lo cremoso del arroz, con un toque de queso manchego y las verduras al dente me ha resultado un maridaje acertado.
Cada vez tengo más claro que el término ‘vino espumoso’, y con las palabras en ese orden, le hace justicia plena.


– Carles Andreu Trepat 2006. D.O. Conca de Barberà.
Hacía muchísimo tiempo que no tenía un vino tinto que visualmente fuera tan ligero en la copa. Capa baja, de esa que te permite ver el mantel a través de la copa. ¿Os acordais de cómo era eso? Es dificil de ver algo así ahora con estos tintos impenetrables a la vista tan al uso.
Es el primer vino que bebo hecho con la variedad Trepat, de modo que tampoco tengo claro
qué esperarme. Este vino me ha resultado un paso menos que insinuante. Todo en él es insinuación de aromas, sabores, recuerdos… Se mece suávemente entre lo que es, lo que insinua, lo que recuerda. Fruta roja, especias cálidas, eucalipto, regaliz de palo. Se sigue meciendo como las volutas del café de la mañana. Me gusta el que no sea un vino tan franco como lo que es habitual en mi beber (casi) diario, no obstante me resultaría más disfrutable si diera ese pasito más y fuera netamente insinuante y sugestivo.


– Dominio de Nobleza. Crianza 2004. Bodegas Dominio de Nobleza. DOC Rioja.
Esta botella me la regalaron unos buenos amigos, afortunadamente me dio tiempo a probarla antes de que la gripe se instalara en mi vida.
Capa media, frutos rojos, suave, equilibrado, un toque final de canela. Un crianza prototípico, pero sin resultar aburridamente redondeado. Tiene sus finas aristas que le hacen interesante. Para mi sorpresa es un monovarietal de tempranillo. Ha sido un vino muy agradable con un tradicional cocido. Desconozco el precio exacto, si bien creo que está notablemente por debajo de 10 EUR, lo cual le haría tener una buena RCP. Una cosa rara: Me ha recordado enormemente al crianza de Cosme Palacios. ¡Ay! ¡Yo que sé! ¡vericuetos raros de mi mente!


– Reymos. Cheste Agraria Cooperativa Vinícola.
Extremadamente pálido y con burbujas enormes. Por lo demás este vino es plénamente
moscatel, con aromas de melocotón, albaricoques y nísperos bien maduros. No me gusta
especialmente, debido al toque de dulzor que presenta. Es un vino nétamente correcto, es sólo que no es de mi gusto.

– Canforrales Selección Tempranillo 2005. Bodegas Campos Reales. DO La Mancha (2.7 EUR)
Pa’qué te voy a decir que sí, si es que no y como te digo una «co» te digo la «o».
Mira que los vinos de esta bodega son agradables y de buena RCP, pero en este caso la
madera ya ha dicho que está aquí para quedarse. Según la etiqueta han sido sólo tres meses, pero más que suficientes para tapar los demás componentes del vino. Madera quemada y vainilla sepultan lo que de bueno pueda tener el vino. Lo dejo para el día siguiente a ver si se calma. Dejándo pasar un día y probando con una copa con más forma de balón la madera y la vainilla sigue estando presente pero no es tan desagradable como el día anterior. Lástima de madera. En cuanto pueda me desquito con el más sencillo de la bodega.

Y hasta aquí el panegírico sobre el cambio climático y el resumen mensual. Devolvemos la conexión a los estudios centrales.

Créditos: La fotografía del «David» de Miguel Angel pertenece a Paueti, que podeis encontrar en Flickr.

Read Full Post »

A %d blogueros les gusta esto: